El cáncer colorrectal es la tercera causa de muerte por cáncer en hombres y mujeres”, afirma la doctora Lorena Lupinacci médica de la Sección Oncología Clínica del Hospital Italiano de Buenos Aires y miembro de la Fundación Tiempo de Vivir.
En el caso de los hombres, después del cáncer de pulmón y de próstata; y, en el caso de las mujeres, después del cáncer de mama y de cuello uterino. “En nuestro país, constituye el 13% de los tumores y se estima que el 2% de la población puede padecer este tipo de cáncer”, asegura la oncóloga clínica. El cáncer colorrectal (CCR) constituye una de las más frecuentes enfermedades oncológicas de la actualidad.
Los factores que participan en su origen son:
-Edad mayor de 50 años
-La herencia, ya que existen formas hereditarias
-Contar con familiares con CCR aumenta el riesgo
-Enfermedades inflamatorias del colon como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn
-Obesidad
-Dietas con alto contenido de grasas y pocas fibras
-Historia de polipós
-Los pacientes que fuman tienen mayor incidencia de CCR.
Métodos de detección precoz
Los métodos de detección precoz disminuyen significativamente se mortalidad. Por ese motivo, en el mundo, se recomienda el rastreo de CCR en población de riesgo.
Los estudios más utilizados son las endoscopias y la sangre oculta en materia fecal, que, indiscutiblemente (salvo en las formas hereditarias), deben efectuarse a partir de los 50 años.
Son métodos que pueden traer un beneficio importante en términos de detección temprana y curación.
El desarrollo actual de la medicina, permite que algo más de la mitad de los pacientes se curen y el resto pueda vivir con pocos síntomas relacionados con sus tratamientos.
“Incluso pacientes con metástasis puede acceder a tratamientos con intención curativa”, finaliza la doctora Lupinacci.
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