Muchas personas hoy en día conocen poco acerca de la tuberculosis. Incluso, piensan que esta enfermedad infecciosa ya no existe en Puerto Rico. No obstante, en el 2013 se reportaron 50 casos de tuberculosis activa en la isla y se identificaron cientos de personas con infección latente de tuberculosis. Aunque estos números podrían parecer pequeños, demuestran que esta enfermedad infecciosa todavía se está propagando y que constituye un riesgo para la población. Es muy importante conocer acerca de la tuberculosis y sus síntomas, para poder identificar la enfermedad rápidamente y evitar el contagio de más personas.
¿Qué es la tuberculosis?
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa seria, causada por una bacteria llamada Mycobacterium Tuberculosis. Se transmite de persona a persona a través del aire. Usualmente, la bacteria afecta los pulmones, pero también puede afectar otras partes del cuerpo, tales como los riñones, la espina dorsal, los huesos y la cabeza.
Cuando una persona enfe
rma con tuberculosis habla, estornuda o tose, libera bacterias al aire. Cualquier persona que esté cerca puede inhalar estas bacterias e infectarse.
La tuberculosis no se transmite:
- Por darle la mano a alguien,
- Compartir alimentos o bebidas,
- Tocar la ropa de cama o los inodoros,
- Compartir cepillos de dientes,
- Dar besos.
Existen dos tipos de tuberculosis: la infección latente y la enfermedad activa. Solo las personas con enfermedad activa pueden transmitir la tuberculosis a otras personas.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de tuberculosis?
Los síntomas de la enfermedad varían dependiendo de dónde las bacterias se estén multiplicando. Algunos de los síntomas de tuberculosis incluyen:
- Tos persistente por 3 semanas o más
- Fiebre
- Sudoraciones nocturnas
- Escalofríos
- Pérdida de peso, sin causa aparente
- Pérdida de apetito
- Cansancio general / fatiga
- Tos con flema y sangre
Síntomas de tuberculosis en otras partes del cuerpo pueden incluir: dolor de cabeza, sangre en la orina y dolor en la espalda.
¿Quiénes deben ser evaluados por sus médicos regularmente?
Aunque la tuberculosis puede afectar a personas de todas edades, razas y niveles socioeconómicos, existen grupos de personas que tienen un mayor riesgo de infectarse y desarrollar la enfermedad. Las personas en estos grupos de mayor riesgo deben hablar con su médico y evaluarse regularmente.
Grupos de Mayor Riesgo
- Personas que han estado en contacto cercano y frecuente con pacientes de TB activa
- Personas infectadas con VIH
- Personas con enfermedades o en tratamientos que suprimen el sistema inmunológico
- Personas que han emigrado de países con alta incidencia de TB (la mayoría de los países en Sur América, Centro América, el Caribe, África o Asia) en los últimos 2 años
- Personas que han visitado o recibido visitas de países con alta incidencia de TB
- Personas que han sido infectadas con la bacteria de TB recientemente en los últimos 2 años
- Empleados o residentes en lugares congregados como: hospitales, hogares para ancianos, hogares de rehabilitación y facilidades correccionales
- Personas con enfermedades tales como: diabetes, silicosis, fallo renal crónico, trasplantes de órganos, cáncer de cabeza o cuello
- Personas que fuman, se inyectan drogas intravenosas y/o consumen alcohol
La vacuna contra la tuberculosis
La vacuna contra la tuberculosis, Bacille-Camille Galmette (BCG), se le administra a infantes y niños en muchos países con alta incidencia de tuberculosis. Esta vacuna no se utiliza en Puerto Rico o los Estados Unidos. Aunque esta vacuna ayuda a proteger a niños contra las formas más severas de tuberculosis, su efectividad es variable y disminuye con el tiempo. Esto significa que los adultos que recibieron esta vacuna como niños pueden infectarse y desarrollar esta enfermedad, si se exponen a la misma. Muchas personas piensan que la prueba de tuberculina no se debe utilizar en personas con la BCG porque siempre dan un resultado falso-positivo, pero esto es un mito. La prueba de tuberculina sí se puede utilizar en personas que han recibido la vacuna BCG.
¿De qué consiste una evaluación para tuberculosis?
Una evaluación para tuberculosis conlleva varios pasos. Usualmente, la evaluación se comienza con un historial médico, un examen físico y una prueba de detección. Las pruebas de detección se usan para ver si la persona tiene la bacteria de tuberculosis en su cuerpo, pero no indican si la persona tiene infección latente o enfermedad activa de tuberculosis.
Existen dos pruebas de detección:
- Prueba cutánea de tuberculina – Esta prueba consiste en la inyección intradermal de un antígeno en el antebrazo. El paciente tiene que regresar de 48-72 horas para que el profesional de salud lea la reacción de la prueba.
- Prueba de sangre IGRA – Esta prueba se hace con una muestra de sangre y el paciente no tiene que regresar una segunda vez para una lectura.
Si la prueba de detección tiene un resultado positivo, la evaluación se continúa con placas de pecho y pruebas bacteriológicas. Estos estudios le permitirán al médico determinar si la persona tiene infección latente o enfermedad activa de tuberculosis. Es muy importante que cualquier persona evaluándose para tuberculosis complete todas las pruebas prescritas por su médico, para así poder recibir un diagnostico apropiado.
Protégase usted y protega a su familia
La tuberculosis puede afectar a cualquier persona, sin importar su edad, sexo, educación o nivel socioeconómico. Solo dejando de respirar podemos evitar por completo la posibilidad de infectarnos con la bacteria de la tuberculosis. No obstante, existen algunas cosas que usted puede hacer para protegerse contra la tuberculosis:
- Oriéntese – Aprenda acerca de la tuberculosis y reconozca los síntomas de tuberculosis activa. Si en algún momento usted presenta síntomas de tuberculosis activa, busque una evaluación médica.
- Riegue la voz – A muchas personas les da vergüenza hablar de la tuberculosis. Eduque a sus familiares y amigos en torno a esta enfermedad infecciosa. Si conoce a alguien que tiene síntomas de tuberculosis activa, exhórtelo para que busque una evaluación médica.
- Pídale a su médico que lo evalúe para tuberculosis – Si usted tiene síntomas o está en un grupo de mayor riesgo, pídale a su médico una evaluación para tuberculosis. Algunos médicos hoy en día también se están olvidando de la tuberculosis y podrían no pensar en hacerle una evaluación excepto cuando usted lo pida.
- Complete su tratamiento según ordenado – Si usted es diagnosticado con infección latente o enfermedad activa de tuberculosis, comience y termine todo su tratamiento, según ordenado por el médico. No terminar el tratamiento de tuberculosis puede llevar a que las bacterias de tuberculosis creen resistencia a los medicamentos y sean más difíciles de eliminar.
Más información
Para más información acerca la tuberculosis o para aprender acerca de los servicios disponibles a través del Departamento de Salud comuníquese con el Programa para el Control de Tuberculosis al 787-765-2929, ext. 3861
Dos hechos biologicos explican por que la terapia combinada es mas efectiva en el tratamiento de la TBC que la monoterapia. El primero es que el tratamiento con una sola droga induce la seleccion de bacilos resistentes y en consecuencia el fallo en eliminar la enfermedad. El segundo es que las diferentes poblaciones bacilares pueden coexistir en un mismo paciente.