Por: Dra. Montserrat Rodríguez
Médica y Nutricionista Transformadora
Estoy segura que has oído esta frase antes, y que incluso lo has experimentado. Personalmente yo las hice todas, y te confieso que de vez en cuando me atraen algunas propuestas que suenan coherentes y sostenibles… Pero inmediatamente me doy cuenta que ese “factor especial” que buscamos en una dieta efectiva y duradera sigue siendo un deseo más que una realidad.
¿Por qué fallan las dietas?
Porque se trata de personalización, y eso lo aleja de lo comercial de la solución colectiva. La nutrición no es un asunto de talla única. Por el contrario, la nutrición y la dieta son tan únicas como tú. Cada día, nuevas investigaciones nos dicen que la nutrición personalizada es la clave para desbloquear todo tu potencial mientras logras tus objetivos.
Entonces, ¿hay una «forma correcta» de comer para todos? No realmente. Nuestros diversos orígenes, ADN único, culturas, ambientes y preferencias personales hacen imposible prescribir una dieta que sirva para todos. La nutrición personal no se trata solo de subirse al último carro de la dieta. Se trata de considerar una gran cantidad de factores:
➡️ Origen Étnico: Tu herencia puede afectar cómo tu cuerpo procesa diferentes alimentos.
➡️ ADN: Tus genes afectan cómo tu cuerpo responde a nutrientes específicos.
➡️ Entorno Actual: Donde vives afecta la disponibilidad de ciertos alimentos y tu estilo de vida.
➡️ Época del Año: Las variaciones estacionales pueden influir en tus necesidades nutricionales.
➡️ Ubicación: Vivir en áreas urbanas o rurales puede afectar las opciones alimentarias y el acceso.
➡️ Niveles de estrés: El estrés afecta tu apetito y tus elecciones alimentarias.
➡️ Estado de Toxicidad: Las toxinas ambientales pueden influir en tu salud.
➡️ Estilo de Vida: Tu rutina diaria y nivel de actividad importan.
➡️ Gustos/Disgustos: Tus preferencias de sabor moldean tu dieta.
➡️ Preferencias Personales: Lo que disfrutas comer importa.
Entonces, si alguien te pregunta acerca de tu «tipo de alimentación», ya sea Paleo, keto, vegano o cualquier otra cosa, recuerda que comer es una actividad tribal. Queremos pertenecer a algo, pero no dejes que eso te ciegue ante la imagen más grande: la personalización.
Las dietas populares a menudo fallan porque no atienden a necesidades individuales. Funcionan hasta cierto punto porque te ayudan a lograr un déficit o exceso de calorías y porque te restringen azúcares y alimentos ultraprocesados. No hay magia, solo calorías tóxicas más o menos.
Algunas dietas también se centran en mejorar la calidad de los alimentos. La dieta cetogénica, por ejemplo, elimina los carbohidratos para promover la pérdida de peso. Otras, como la dieta Paleo, enfatizan alimentos integrales y densos en nutrientes. Esto ayuda con el control del peso y te deja sintiéndote satisfecho, reduce el exceso de comida y proporciona nutrientes esenciales.
Muchas dietas modernas enfatizan alimentos enteros y de un solo ingrediente, asegurándose de obtener suficientes frutas y verduras, las fuentes principales de estos micronutrientes vitales.
El momento de los nutrientes y la frecuencia de las comidas también juegan un papel en la nutrición moderna. Por ejemplo, el ayuno intermitente te guía sobre cuándo comer para optimizar la eficacia de tu dieta. La «ventana anabólica» post-entrenamiento es otro ejemplo. Es cuando tu cuerpo está listo para absorber nutrientes como carbohidratos y proteínas.
Pero aquí está la clave del asunto: solo algunas de estas estrategias funcionan si controlas tu ingesta calórica general. Pero incluso si reduces los carbohidratos, pero comes en exceso calorías, tu cuerpo aún puede almacenar grasa.
Ahora, te pongo un ejemplo usando un esquema piramidal:
➡️ Nivel 1: Manipulando la Composición Corporal: La mayoría de las dietas modernas logran esto, ayudándote a controlar el peso.
➡️ Nivel 2-5: Más Allá: En estas instancias el foco está en mejorar la salud general, el rendimiento y la ingesta de micronutrientes. Cuantos más niveles alcances, mejores serán tus resultados.
Entonces, cuando veas historias de éxito de diferentes dietas, sabrás que trabajan de manera integral en todos los niveles con estrategias específicas para cada uno de ellos.
Al elegir el plan de nutrición adecuado, piensa más allá de la moda y las promesas fantásticas que ofrecen. Considera cómo afecta tus niveles de energía, bienestar, sueño y relación con la comida. Un enfoque holístico brinda mejores resultados a largo plazo.
Mejorar la composición corporal es un objetivo común, pero recuerda la salud y el rendimiento. Tu salud impacta directamente en tu apariencia; tu nutrición debería ayudarte a rendir al máximo en todos los aspectos de la vida.
Monitorea continuamente estos tres factores: composición corporal, salud y rendimiento. Si alguno de ellos disminuye, tu plan de nutrición necesita ajustes.
Conclusión
La dieta perfecta se trata de algo más que seguir una tendencia. Se trata de combinar los protocolos nutricionales correctos con tus necesidades únicas. Por esta razón solo un especialista realmente experto y con una formación académica completa es la persona ideal para ayudarte a desbloquear todo el potencial de salud de tu cuerpo. Por supuesto si tú quieres yo puedo ayudarte a lograrlo.
Para más información, drmontserrat.com